domingo, 17 de agosto de 2008

¿Sentido común?

El superintendente de distrito escolar de Harrold (Texas), David Thweatt, dónde se encuentra la escuela en la que a partir del próximo curso se permitirá a los profesores que asistan a clase con armas, asegura en alusión a esta drástica medida que: "Tenemos un sistema de cierres, tenemos cámaras, pero la pregunta para la que no tenemos respuesta es: "¿Qué pasa si alguien entra? ¿Qué vamos a hacer?". "Es de sentido común".

Es obvio que su escala de valores y la mía están a años luz. Sería interesante revisar el concepto de sentido común porque, en mi opinión, carece de él quién osa apoyar una medida tan surrealista como la aludida.

Aún recuerdo con estupor las imágenes de la película de Michelle Moore Bowling for Columbine así como su desgarrador mensaje que, al parecer, no ha tocado la fibra sensible de los estadounidenses.

Mi capacidad de imaginación se agota al intentar visualizar a los profesores de la escuela rural. Oh heavens! No hablamos de un centro académico ubicado en el centro de Harlem. Se trata presuntamente de una institución educativa situada en un área de bajo riesgo. Sin embargo, la medida, es letal y demoledora. ¿Es el ejemplo que deben recibir los estudiantes?

3 comentarios:

Miguel dijo...

El tema de las armas de fuego es otra gran lacra de la sociedad, como puedan serlo las drogas.

Mi opinión es que, cuando más accesibilidad, más riesgo de que se produzcan hechos violentos.

Pienso que la base de todo es la educación y también es muy importante que todos tengamos acceso a las herramientas necesarias para poder desarrollarnos como personas, tanto en el plano físico como en el psicológico.

Anónimo dijo...

We've live in a gun culture in United States. The students need protection in school. They live in a rural area in Texas far from police protection.

Miguel dijo...

Hola Frank!
Tú conoces mejor que yo la realidad estadounidense y es posible que la autoprotección sea, a corto plazo, la menos mala de las soluciones para salvaguardar la vida de los estudiantes. Pero a largo plazo se debería pensar en otras medidas menos drásticas, basadas en la educación y en la justa distribución de la riqueza.